Una pequeña Lonja en pleno centro de Torre del Mar.
¿Por qué ir a comer pescaito al Yate, y no a otros locales de la zona?
Tres son las razones, fácil y sencillo.
La primera y más importante.El pescado es fresco, nada de congelado como en otros restaurantes, que incluso tienen más nombre y antigüedad.
Supongo que nadie quiere ir a comer pescado, y pasarse toda la tarde bebiendo agua y con la boca más salada y seca que el calzoncillo de un pescador.
Otra de las razones, es que parte de su pescado, es de la misma Caleta de Vélez. 100% Calidad. De nuestro mar a la mesa. Entre ellos los jureles, bacalailla, salmonetes, sardinas y nuestro pescado estrella el Boquerón.
Y por último y no menos importante, sobre todo para nuestros bolsillos.
Es que si te pides una bebida en barra o en las mesitas de pie, te ponen tu tapita de pescado frito a elegir o unas gambitas. Por lo que puedes probar varios manjares del mar por un precio muy asequible.
Tienen mesas tanto en el salón interior, como en la terraza.
Pero el auténtico ambiente del Yate se respira en la barra y sus alrededores. Siempre llena, ya sea un día entre semana como los fines de semana. El secreto es ir a primera hora.
El único pero es el bullicio que se forma y la gran cantidad de gente, que puede ser algo estresante.
Los Manjares.
Las gambas cocidas, si quereís empezar bien el día, no os podéis ir sin probar sus gambas frescas, que quitan el sentido.6 eur ½ ración
La Fritura Malagueña, si no sabemos que pescado pedir, aquí tenemos un popurrí. Además las gambas rebozadas buenísimas. Matamos varias gaviotas de un tiro. 15 eur ración.
La rosada frita, de las mejores que he probado, y junto un alioli que debería tener una mención especial, hace que la rosada sea un plato de obligatoria elección. 5,50 eur ½ ración.
Destacar también la gran variedad de marisco fresco, y el toque personal en alguno de sus platos. Señalando las almejas, las cigalas y el revuelto de marisco.
Ubicación.
Buen provecho.